dc.description | "El rápido proceso de transformación del país de las últimas décadas ha reflejado avances de los indicadores sociales. En educación, la cobertura en el acceso a primaria ha mejorado sustancialmente, y en salud han caído las tasas de mortalidad infantil. Las cifras para 1992 indican el grado de incidencia de la pobreza por ingresos sigue siendo elevado. La pobreza, la calidad del empleo y la falta de acceso a los servicios sociales son fenómenos que se presentan juntos. El acceso a dos sectores sociales vitales, educación y salud, presenta diferencias muy significativas. En salud los desequilibrios son preocupantes. En vivienda la investigación del CENAC, incluida en esta revista, muestra como la distribución de los hogares beneficiarios de los subsidios gubernamentales tiene una menor concentración, lo que indica que el programa de vivienda no ha estimulado suficientemente la postulación de los hogares de menores ingresos. La coyuntura económica ha favorecido la generación de empleo. La atención de diversas necesidades sociales exige el aumento de la inversión pública social. No obstante el crecimiento que viene experimentando el gasto público, no evidencia que se haya dado prioridad a la inversión social básica, entendida como el gasto en educación básica, salud básica y vivienda de interés social. Como lo evidencian los artículos sobre migraciones, estructura socio-ocupacional y pobreza, y sobre criminalidad urbana incluidos en esta revista, se han dado interesantes transformaciones en los procesos sociales del país. En el artículo de Miguel Ignacio Gómez, sobre la evolución de las economías campesinas entre 1988 1992, el ingreso del sector de la agricultura comercial registra una caída en sus ingresos." | |