"En el artículo anterior sobre las evaluaciones de programas de educación (ver Coyuntura Social No.1) se decía que la tarea de evaluar en forma sistemática, repetida y discriminada su propia actividad constituye un elemento irremplazable de toda buena administración. Este ejercicio es tanto más importante cuanto más consecuencias en términos de bienestar social, o cuanto mayor volumen de recursos humanos, financieros y materiales maneja una organización. Por eso, cuando se piensa en los múltiples, socialmente cruciales y, en ocasiones, ambiciosos programas que adelanta el gobierno colombiano en materia de salud, seguridad social y vivienda, surge la inquietud sobre qué tan oportuna y correctamente se los está evaluando. Por cierto, el estudio entre manos ha buscado averiguar con qué frecuencia se adelantan evaluaciones globales (como contrapuestas a evaluaciones parciales y rutinarias de funcionamiento) sobre los diversos programas desarrollados por el gobierno nacional en las áreas mencionadas, y qué calidad exhiben esas evaluaciones. Asimismo se pretendió explorar en forma preliminar qué efecto han tenido las aludidas evaluaciones en las decisiones tomadas posteriormente dentro del área respectiva. Previas unas aclaraciones conceptuales, se considerarán a continuación, por separado, las áreas de la salud, la seguridad social y la vivienda."